14 de enero de 2013
Tanto casancio de ver, de escondernos, nos metemos debajo del manto de la oscuridad y cegando miles de sonrisas, nos ahogamos, en el lodo, en la mugre de una oscuridad inducida, innata y casi ficticia, inexistente, solo presente en nuestras mentes.
Entradas más recientes
Entradas antiguas
Inicio
Suscribirse a:
Entradas (Atom)